Contendientes:

Kevin Jon Heller, Redactor Opinio Juris .

Kevin Jon Heller, integrante del foro virtual Opinio Juris, afirma que el argumento de que el procesamiento del Presidente sudanés, Omar Hassan al-Bashir, por parte de la Corte Penal Internacional (CPI) podría obstaculizar el proceso de paz es legalmente irrelevante para la solicitud de una orden de arresto realizada por la oficina del fiscal general de la Haya. Ir a fuente

IRRI - Refugees Rights News, Newsletter IRRI - International Refugee Rights Initiative.

A pesar de algunas señales del Gobierno sudanés en cuanto a su colaboración con la Corte Penal Internacional (CPI), los sectores más radicales mantienen la posición de que la CPI no tiene jurisdicción en Sudán.
Desde esta solicitud, el Gobierno soporta una presión creciente en cuanto a su política para la región occidental.
Las posturas de los países miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y la Unión Africana van desde el apoyo total al fiscal hasta el completo rechazo de un juicio, con diferentes argumentaciones. Ir a fuente

Andrew T. Cayley, Journal of International Criminal Justice Oxford University.

El autor discute si es apropiado la definición legal de los crímenes en Darfur como “genocidio”. Ir a fuente

John Morlino, Investigador Independiente.

El autor reflexiona sobre el rol de los activistas contra el genocidio de Darfur. Se pregunta si, por su actitud de "no irritar a sus supuestos aliados (ONU, UA, OTAN y Estados Unidos de América), han empeorado en lugar de mejorar la situación de las personas en Darfur.
Morlino se pregunta por qué apoyaron medidas "fallidas", "falsas" y "con posiblidades remotas de éxito" como valora el despliegue de fuerzas de paz de la Unión Africana y las Naciones Unidas; las denuncias contra China en lugar de destapar la situación de complicidad entre los gobiernos de Sudán y los Estados Unidos; y el recientemente anunciado proceso judicial contra el Presidente sudanés, al-Bashir. Ir a fuente

Jacqueline Geis, directora de desarrollo y del proyecto Brookings-Bern Project on Internal Displacement.

Este estudio examina qué factores externos, si es que alguno, aportan la acusaciones de la CPI a favor de la paz en una situación dada. Los resultados del análisis sugieren que son necesarias ciertas precondiciones para que las acusaciones tengan impacto en las negociaciones de paz. Primero, un cierto nivel de cohesión y la consecuente voluntad de imponer costas reales por incumplimiento. Segundo, la corte tiene que ser percibida como un árbitro imparcial de justicia internacional y contar con el respeto y la legitimación de la población nacional sobre la que trabaja, tanto para recoger evidencia como para ocuparse de la impunidad de un modo imparcial. Ir a fuente

Andrew Stroehlein, Communications Director International Crisis Group.

Informe de Crisis Group sobre la relación entre la orden de arresto emitida por La Haya contra el Presidente sudanés y la resolución del conflicto de Darfur. Recomendaciones a las partes implicadas así como a entidades regionales e internacionales. Ir a fuente

Thijs Bouwknegt, Redactor Justicia Internacional Radio Netherland.

África, el más ferviente partidario de la Corte Penal Internacional, CPI, está reconsiderando su postura. Los africanos opinan que la Corte se concentra demasiado en su continente.
Los africanos solían ser los partidarios más fervientes de la Corte Penal Internacional. Pero ahora lo están reconsiderando, preocupados porque la Corte permanente para los crímenes de guerra está apuntando hacia su continente.
Los críticos opinan además que la Corte debería trasladar su trabajo al continente, y Tanzania se ofrece como sede para algunas audiencias. Ir a fuente

Benjamin Frymer, Director Project Censored.

“Los estados Unidos promovieron la acusación de la Corte Penal Internacional (CPI) contra el Presidente sudanés, Omar al-Bashir, por crímenes de guerra en Darfur, para justificar la continua explotación occidental y las intervenciones militares en la región rica en recursos.
‘América es un país oportunista -explica el embajador sudanés Abdalmahmood Abdalhaleem Mohamad-. Quieren usar a la CPI sin ser parte de ella. En efecto, los soldados estadounidenses pueden tener inmunidad, pero no el Presidente de Sudán’”. Ir a fuente

Simon Ben Okolo, Investigador Independiente.

El autor destaca que lo que importa no es el debate sobre cómo deberían ser etiquetadas las atrocidades en Darfur sino el hecho de que las matanzas de darfuríes continúan todavía. En lugar de debatir sobre cómo deberían llamarse estos sucesos, la comunidad internacional debería esforzarse en proteger a la gente de más violencia continuada, sugiere el autor. Ir a fuente

Jone Bilbao López de Armentia, Prácticas Independiente.

De momento, parece que el hecho de que el presunto responsable de muertes y abusos contra la población de Darfur siga ejerciendo de Presidente de Sudán y moviéndose por el mundo libremente no preocupa en exceso a la comunidad internacional; o, al menos, eso es lo que demuestra, ya que sigue sin capturar y juzgar al presunto criminal. Ir a fuente