En una declaración emitida por la oficina de información pública de la Misión de mantenimiento de la paz, Unamid da la bienvenida a la orden, que instruye a todos los miembros del (MJI) a seguir cumpliendo plenamente las leyes internacionales y locales que rigen la protección de los niños y las niñas en los conflictos armados y a no reclutar como soldados, no asociarse con ellos, ni permitir que se unan voluntariamente. La Orden, que sigue a una anterior emitida por el grupo en el año 2015, también prohíbe estrictamente a los miembros del JEM de todas las otras formas de abuso y explotación de niños y niñas, incluyendo violencia sexual, secuestro, asesinato y mutilación, así como ataques a escuelas y hospitales. "Es alentador ver este último compromiso con la protección de los niños y niñas", dijo el Representante Especial Conjunto Interino, Jeremiah Mamabolo. "Unamid seguirá colaborando con todas las partes en el conflicto de Darfur sobre su responsabilidad de protegerlos y para poner fin a todas las formas de violaciones contra la infancia". Jurídicamente hablando, el artículo 38 de la Convención de Derechos del Niño aprobada en 1989, dice que “los Estados Partes adoptarán todas las medidas posibles para asegurar la protección y el cuidado de las niñas y niños afectados por un conflicto armado". Casi todos los Estados del mundo han ratificado esta Convención y se han obligado de esta manera a cumplir sus estamentos. Este tratado se completó el 25 de mayo de 2000 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el llamado Protocolo Facultativo. Este tratado prohíbe a gobiernos y grupos armados reclutar niñas, niños y jóvenes menores de 18 años y utilizarles en conflictos bélicos. Aunque, en algunos países aún se sigan utilizando a niños y niñas como soldados, parece que vamos mejorando, y nos vamos acercando a la no violación de sus derechos, y a evitar que sean partícipes de una situación de conflicto. Los niños y las niñas, deben seguir siempre siendo niños y niñas.